Se recibió de contadora y dedicó toda su vida a la docencia. Hoy, la riocuartense María José Muñoz es furor en las redes por sus ideas prácticas para la vida cotidiana

María José Muñoz es una contadorar riocuartense que se dedicó toda su vida a la docencia. Walter, su esposo es ingeniero agrónomo. Entre los dos tienen la filosofía de vida de darle valor a las cosas que tienen y evitar comprar nuevas. Para ellos es muy importante el cuidado del medio ambiente. Tienen su propia huerta, composteras y reutilizan todo al máximo posible.
Hace algunos años, en 2021, María comenzó a crear contenido para redes. De forma casera, mostraba todo lo que se podía hacer desde el hogar para darle una segunda oportunidad a las cosas y evitar tirarlas. Empezó a compartir consejos en su Instagram, armando así una comunidad de más de 160 mil seguidores.

Además, pronto lanzará junto con una socia un emprendimiento de carteras recicladas: Eco Bags.
Otro Punto fue a la casa de la influencer para charlar con ella y conocer su historia. María nos recibe en su living, donde se pueden observar: cuadros, espejos, floreros y demás elementos realizados e intervenidos por ella misma.
-¿Cómo fue que empezó a crecer tu público en redes?
-Lo que sucedió fue que uno de los reels se hizo viral y desde allí me empezaron a subir los seguidores. Ese video llegó a tener 6 millones de reproducciones. Tirar aceite usado en el resumidero contamina 10 mil litros de agua y para evitar hacer esto podés envasarlo y llevarlo a algún lugar para que sea correctamente desechado o hacer algo con ese material. En ese reel mostré algo re simple, que era cómo hacer una velita con ese aceite utilizado y evitar tirarlo y contaminar.
–¿Cómo te impactó a vos esta popularidad?
-Al principio me dio un miedo tremendo. Nunca tuve haters y ahora casi que tampoco. Pero con ese video tenía muchos comentarios y algunos nada lindos. Una vez me escribieron que era horrible lo que había hecho. Y respondí diciendo que tenía razón pero que tuvieran piedad porque no vengo del palo de las artes plásticas. Lo que me generó temor es esto de empezar a ser tan pública, sobre todo por mis hijos, pensar qué iban a decir y demás pero ya se acostumbraron a mi exposición.
María suele aparecer poco en los videos, su contenido es más que nada mostrar algo de su hogar, la huerta, hacer alguna manualidad. “Empecé subiendo material de cosas cotidianas. Enseñar las propiedades de las plantas o cómo se cultivan. Y después ya fui mostrando cuestiones de la vida misma”, comenta la profesional y dice que en realidad había abierto el perfil para escribir, ya que le apasiona la escritura pero: “pasaron cosas”.
Cifras alarmantes
Para la contadora es sumamente importante cuidar nuestro hábitat. Es por eso que desde hace años junto a su esposo separan los residuos.
“Una sola persona produce por día un kilo y medio de basura aproximadamente. Por año en casa reutilizamos una tonelada de residuos”, dice María José.
Una de las ideas de Muñoz es hacer composteras comunitarias. La iniciativa fue presentada en el Presupuesto Participativo pero no salió seleccionada.
-¿Lo volverán a presentar?
-Sí, claro. Lo que desde el gobierno municipal nos comentaron es que es difícil de controlar un proyecto asi. Pero teníamos la idea que se hiciera en pocas cuadras. Con diez familias que composten reutilizaríamos un montón de residuos. Tuvimos varias entrevistas con candidatos a intendente de la ciudad en el que planteamos el tema de la basura como un problema serio. Pero no prosperó. Mientras tanto, sigue creciendo la cantidad de basura donde la están depositando.

En su casa, tiene varias composteras y cuenta que se puede aprovechar casi todo de lo que generalmente desechamos. Hay una diferencia entre basura y residuo. Residuo es lo que se puede volver a utilizar. Por un lado lo orgánico como cáscaras, frutas, yerba. Y por otro lado, cartón, papel, plástico, que se puede reciclar. Lo que finalmente queda de basura si hacemos esa separacion, es prácticamente nada.
-¿Sí o sí se hace en el patio el compostaje?
-No necesariamente. También podés hacerlo en macetas. Ponés todo lo orgánico ahí y lo tapas con hojas. No tiene olor ni nada. Eso se va degradando y se hace tierra negra. Yo pongo un tarrito sobre otro y filtro lo que sale. Ese líquido, se puede usar para regar las plantas. Es un excelente fertilizante.
Gente de buena madera
María José y su esposo Walter tienen pensado otros proyectos respecto al cuidado ambiental. Uno es hacer madera plástica con los envoltorios de los paquetes de fideos. Se pueden crear durmientes para las tranqueras de los campos, piso, construir, de todo.
Otra de las propuestas es el reciclado textil que consiste en desarmar la ropa que ya nadie usa para dárselas de manera gratuita a costureras para crear sus emprendimientos. De una prenda pueden servir los botones, puntillas, lentejuelas, etc.
Cada tanto aprecés en los videos, ¿te conocé la gente en la calle?
Sí. Mi público suelen ser mujeres de entre 35 y 55 años que generalmente no comentan tanto o no dan like, pero cuando me las cruzo me dicen que ven todo lo que hago y me felicitan. Suelo ser tímida con eso y no me creo nada. Solo soy una persona normal enseñando algunos trucos útiles y fáciles para el hogar.
– ¿Monetizás con Instagram?, ¿te gustaría vivir de las redes?
-No monetizo. Mi vocación sigue siendo la docencia. Lo que yo quiero es enseñar. Sí, me gustaría dictar un taller online para gente que quiera aprender a hacer cosas y no se anime, como me pasó a mí al principio.
-¿Hacés canjes?
-Soy muy cuidadosa con eso. Siempre digo que soy la anti influencer porque no incentivo a que compren sino todo lo contrario. Me han ofrecido mucho dinero por promocionar productos que no representan lo que hago ni mi forma de vida y lo he rechazado.
Por último, la apasionada del “hágalo usted misma” dice: “Mi mensaje es siempre, si te hace falta compra, pero sino reutilizá”.